8 de junio de 2010


Sé que ya de todo se ha dicho que mi andar ya no es igual que mis penas son tu condena que mis ojos son la frialdad. Sé que has dado justo en mi pecho munición a voluntad déjame salir de este encierro no soy tu chica ni tu verdad.
No me dejes morir así, no me dejes caer en la trampa.